sábado, 27 de marzo de 2010

LAS TRES REJAS

Jacek Yerka

El joven discípulo de un sabio filósofo llega a casa de éste y le dice:
-Oye, maestro, un amigo tuyo estuvo hablando de ti con malevolencia...
-¡Espera! lo interrumpe el filósofo-. ¿Ya has hecho pasar por las tres rejas lo que vas a contarme?
-¿Las tres rejas?
-Sí. La primera es la verdad. ¿Estás seguro de que lo que quieres decirme es absolutamente cierto?
-No. Lo oí comentar a unos vecinos.
-Al menos lo habrás hecho pasar por la segunda reja, que es la bondad. Eso que deseas decirme, ¿es bueno para alguien?
-No, en realidad no. Al contrario...
-¡Ah, vaya! La última reja es la necesidad. ¿Es necesario hacerme saber eso que tanto te inquieta?
-A decir verdad, no.
-Entonces -dijo el sabio sonriendo-, si no es verdadero, ni bueno, ni necesario, enterrémoslo en el olvido.

domingo, 21 de marzo de 2010

LA CONCENTRACIÓN Y LA PIEDAD

Rob Gonsalves

Un joven, preso de la amargura acudió a un monasterio en Japón y le expuso a un anciano maestro:
- Querría alcanzar la iluminación, pero soy incapaz de soportar los años de retiro y meditación. ¿Existe un camino rápido para alguien como yo?
-Te has concentrado a fondo en algo durante tu vida? preguntó el maestro.
- Solo en el ajedrez, pues mi familia es rica y nunca trabajé de verdad.
El maestro llamó a un monje. Trajeron un tablero de ajedrez y una espada afilada.
- Ahora vas a jugar una partida muy especial de ajedrez. Si pierdes te cortaré la cabeza con esta espada; y si por el contrario ganas, se la cortaré a tu adversario.
Empezó la partida. El joven sentía las gotas de sudor recorrer su espalda, pues estaba jugando la partida de su vida. El tablero se convirtió en el mundo entero. Se identificó con él y formó parte de él. Empezó perdiendo, pero su adversario cometió un desliz. Aprovechó la ocasión para lanzar un fuerte ataque, que cambió su suerte. Entonces miró de reojo al monje. Vió su rostro inteligente y sincero, marcado por años de esfuerzo. Evocó su propia vida, ociosa y banal... y de repente se sintió tocado por la piedad. Así que cometió un error voluntario y luego otro... Iba a perder. Viéndolo, el maestro arrojó el tablero al suelo y las piezas se mezclaron.
-No hay vencedor ni vencido -dijo-. No caerá ninguna cabeza.
Se volvió hacia el joven y añadió:
-Dos cosas son necesarias: la concentración y la Piedad. Hoy has aprendido las dos.

viernes, 12 de marzo de 2010

Simon Bull

Cuando mudamos el parecer que tenemos sobre alguien es más probable que seamos nosotros los que hemos variado que la persona aquélla.

Antonio Gala

Dalí

Antes de iniciar la labor de cambiar al mundo da tres vueltas por tu propia casa.

Proverbio Chino

miércoles, 10 de marzo de 2010

IMÁGENES

Yacek Yerka



Trabajaba un padre en su despacho cuando entró su hija pequeña al borde de un ataque de nervios, medio llorosa y compungida.
- ¿Qué pasa hija? ¿Por qué estás tan deprimida?
- ¡Es que mi mesa se desordena demasiado fácilmente! - Dijo la niña.
- Enséñamelo.
Fueron a la habitación de la niña, y esta enseñándole la mesa le dijo:
- ¿Ves? Yo la ordeno, pero se desordena demasiado fácilmente.
El padre extrañado le dice:
- Enséñame como la mesa está ordenada.
La niña recoge todo, pone la taza con los lápices arriba a la derecha, una libreta arriba a la izquierda, una regla a la derecha, una goma de borrar abajo a la izquierda y así sucesivamente hasta que al fin, contenta, dice sonriendo:
- ¡Ya está!
El padre, extrañado pregunta:
- ¿Y si cambio esto de aquí, un poco a la izquierda?
- ¡Ah no Papi! Así ya no está ordenada.
- Ah ¿Y si tomo esto otro y lo cambio por esto?
- ¡Aun me la desordenas más!
- ¿Y si cambio de sitio la taza de los lápices por la libreta?
La niña, al borde de las lágrimas dice:
- ¡Papa! ¡Me estás desordenando toda la mesa!
- No, hija no, la mesa no está desordenada. Lo que pasa es que tú tienes muchas imágenes para que la mesa esté mal, y sólo una para que esté bien.

(anónimo)

sábado, 6 de marzo de 2010

Guillermo Pérez Villalta
Lo sabe todo, absolutamente todo. Figúrense lo tonto que será.

Miguel de Unamuno

Ferjo
La existencia es un viaje en el que no existen los caminos llanos: todo son subidas o bajadas.

Arturo Graf

Alejandra Salgado

En el fondo son las relaciones con las personas lo que da sentido a la vida.

Karl Wilhelm Von Humboldt


Mayte
Para darse por satisfecho con las cosas sencillas se necesita un alma grande.

Arturo Graf

Rob Gonsalves
Nadie puede hacer que te sientas inferior sin tu consentimiento.
Eleanor Roosevelt
Yacek Yerka
Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro.

René Descartes

Alberto Pancorbo
La esperanza es el peor de los males, pues prolonga el tormento del hombre.

Friedrich Nietzsche

lunes, 1 de marzo de 2010

QUIERO

Ripolles



Quiero que me oigas, sin juzgarme.
Quiero que opines, sin aconsejarme.
Quiero que confíes en mi, sin exigirme.
Quiero que me ayudes, sin intentar decidir por mi
Quiero que me cuides, sin anularme.
Quiero que me mires, sin proyectar tus cosas en mi.
Quiero que me abraces, sin asfixiarme.
Quiero que me animes, sin empujarme.
Quiero que me sostengas, sin hacerte cargo de mi.
Quiero que me protejas, sin mentiras.
Quiero que te acerques, sin invadirme.
Quiero que conozcas las cosas mías que más te disgusten,
que las aceptes y no pretendas cambiarlas.
Quiero que sepas, que hoy,
hoy podés contar conmigo.
Sin condiciones.

Cuentos Para Pensar -Jorge Bucay-