lunes, 27 de diciembre de 2010

EL RATÓN Y LA RATONERA

Jacek Yerka

Un ratón vagabundo llegó a una casa. Mirando por un agujero de la pared ve a un hombre entregando un paquete y una mujer abriendo el paquete, rápidamente pensó: "¿que tipo de comida podrá haber allí? y se imaginó un sabroso queso se le hacia agua la boca de pensar que era de sus preferidos quedó aterrorizado, cuando descubrió que era una ratonera.
Fue al patio de la casa a advertir a todos: "¡hay una ratonera en la casa, una ratonera!" la gallina que estaba buscando sus lombrices en la tierra, cacareo y le dijo: "¡Discúlpeme sr. Ratón; entiendo que sea un gran problema para usted, pero a mi no me perjudica en nada, ni me molesta! " y el ratón se entristeció.
El ratón siguió corriendo buscando ayuda llego hasta el cordero y le dijo: "¡Hay una ratonera en la casa!", "¡Discúlpeme, sr. Ratón, pero no veo nada que pueda hacer, yo como pasto. Quédese tranquilo, usted está en mis oraciones!"
El ratón se fue hasta donde estaban las vacas, y éstas le dijeron: ¿Que nos dice sr. Ratón?, ¿una ratonera?, ¿estamos en peligro por casualidad nosotras?, ¡creo que no!"
Entonces el ratón se volvió a la casa, cabizbajo y abatido, para encarar sólo la ratonera... Aquella misma noche se escuchó un ruido, como el de una ratonera agarrando a su víctima. La mujer del estanciero corrió a ver que había en la ratonera, pero, en la oscuridad, no vio que la trampa había agarrado la cola de una víbora venenosa. La víbora la mordió. El criado la llevó corriendo al hospital. La mujer volvió con fiebre, nada mejor que un buen caldo de gallina. El hombre entonces tomó el cuchillo y fue a buscar al principal ingrediente: la gallina.
Como la enfermedad de la mujer continuaba, amigos y vecinos vinieron a verla para alimentarlos, hubo que matar al cordero. Pero la mujer no resistió, y acabó falleciendo. Muchas personas vinieron al funeral. El pobre hombre, muy triste y agradecido por la solidaridad, resolvió matar a las vacas para darle de comer a todos.
La próxima vez que oigas decir que alguien esta enfrentando un problema, y creas que a ti no te afecta, piénsalo dos veces, en todas las casas pueden necesitar una ratonera ¡y todos los integrantes corren peligro! Ayuda a tu prójimo, recuerda siempre estas palabras... "amarás a tu prójimo como a ti mismo."

En una comunidad, como en un grupo de amigos y en la propia familia cuando un integrante está en un problema, este problema es de todos y juntos deben resolverlo o ver en qué pueden ayudar para aligerar la carga del problema.

EL ROBLE Y LA HIEDRA

Dalí

Un hombre edificó su casa. Y la embelleció con un jardín interno. En el centro plantó un roble. Y el roble creció lentamente. Día a día echaba raíces y fortalecía su tallo, para convertirlo en tronco, capaz de resistir los vientos y las tormentas.
Junto a la pared de su casa plantó una hiedra y la hiedra comenzó a levantarse velozmente. Todos los días extendía sus tentáculos llenos de ventosas, y se iba alzando adherida a la pared.
Al cabo de un tiempo la hiedra caminaba sobre los tejados. El roble crecía silenciosa y lentamente.
- "¿Cómo estás, amigo roble?", preguntó una mañana la hiedra.
-" Bien, mi amiga" contestó el roble.
-" Eso dices porque nunca llegaste hasta esta altura ", agregó la hiedra con mucha ironía. "Desde aquí se ve todo tan distinto. A veces me da pena verte siempre allá en el fondo del patio".
-" No te burles, amiga", respondió muy humilde el roble. " Recuerda que lo importante no es crecer deprisa, sino con firmeza ".
Entonces la hiedra lanzó una carcajada burlona.
Y el tiempo siguió su marcha.
El roble creció con su ritmo firme y lento.
Las paredes de la casa envejecieron.
Una fuerte tormenta sacudió con un ciclón la casa y su jardín. Fue una noche terrible.
El roble se aferró con sus raíces para mantenerse erguido. La hiedra se aferró con sus ventosas al viejo muro para no ser derribada. La lucha fue dura y prolongada.
Al amanecer, el dueño de la casa recorrió su jardín, y vio que la hiedra había sido desprendida de la pared, y estaba enredada sobre sí misma, en el suelo, al pie del roble. Y el hombre arrancó la hiedra, y la quemó.
Mientras tanto el roble reflexionaba:

" Es mejor crecer sobre raíces propias y crear un tronco fuerte, que ganar altura con rapidez, colgados de la seguridad de otros"



jueves, 9 de diciembre de 2010

ANTOINE DE SAINT-EXUPÉRY

Dalí

El mundo entero se aparta cuando ve pasar a un hombre que sabe hacia dónde va.

viernes, 3 de diciembre de 2010

RÊVER

Rob Gonsalves

Hay muchas almas que ya no están
Se han ido con sufrimiento y con dolor
Hemos condenado nuestras diferencias
Parece se que nunca podremos estar juntos
Nuestras vidas son insignificantes
Paisajes en llamas son nuestro medio ambiente
Estamos rodeados de un frío aroma mortal
Si el hombre no cambia
Entonces solo nos queda
Soñar
Yo sueño con podernos amar
Y respirar un nuevo aire
Para que la humanidad pueda renacer
De este manto de sangre
Que la violencia sea ficción
Que no haya mentira
Ni haya verdad
Yo sueño con podernos amar
¿Para qué estamos derribando muros?
Si seguimos construyendo sepulturas
Mientras que sigamos ignorando la tolerancia
No habrá ninguna solución
Los ángeles ya no nos protegen
Nos abandonan como un mundo inerte
Qué está suspendido en la eternidad
El mundo es como un reloj
Que está punto de …
Detenerse
Sueño con poder amarnos
Y respirar un nuevo aire
Para que la humanidad pueda renacer
De este manto de sangre
Que la violencia sea ficción
Que no haya mentira
Ni haya verdad
Yo sueño con podernos amar.

Myléne Farmer


jueves, 2 de diciembre de 2010

Victor Frankl

Dalí


Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento.

UN VIOLINISTA LLAMADO PAGANINI

John Pitre

Algunos decían que él era muy extraño. Otros, que era sobrenatural. Las notas mágicas que salían de su violín tenían un sonido diferente, por eso nadie quería perder la oportunidad de ver su espectáculo. Una cierta noche, el palco de un auditorio repleto de admiradores estaba preparado para recibirlo. La orquesta entró y fue aplaudida. El maestro fue ovacionado. Más cuando la figura de Paganini surgió, triunfante, el público deliró. Paganini coloca su violín en el hombro y lo que se escucha es indescriptible. Breves y semibreves, fusas y semifusas, corcheas y semicorcheas parecen tener alas y volar con el toque de sus dedos encantados. De repente, un sonido extraño interrumpe el solaz de la platea. Una de las cuerdas del violín de Paganini se rompió. El maestro paró. La orquesta paró. El público paró. Pero Paganini no paró. Mirando su partitura, continúa arrancando sonidos deliciosos de un violín con problemas. El maestro y la orquesta, exaltados, vuelven a tocar. Antes de que el público se serenara, otro sonido perturbador derrumba la atención de los asistentes. Otra cuerda del violín de Paganini se rompe. El maestro paró nuevamente. La orquesta paró nuevamente Paganini no paró. Como si nada hubiese sucedido, él olvidó las dificultades y avanzó sacando sonidos de lo imposible. El maestro y la orquesta, impresionados volvieron a tocar. Pero el público no podría imaginar lo que estaba por suceder. Todas las personas, atónitas, exclamaron OHHH! Una tercera cuerda del violín de Paganini se rompe. El maestro se paralizó. La orquesta paró. La respiración del público se detuvo. Pero Paganini Como si fuese un contorsionista musical, arranca todos los sonidos de la única cuerda que sobrara de su violín destruido. Como si fuese un contorsionista musical, arranca todos los sonidos de la única cuerda que sobrara de su violín destruido. El público parte del silencio para la euforia, de la inercia para el delirio. Paganini alcanza la gloria. Su nombre corre a través del tiempo. No es apenas un violinista genial. Es el símbolo del profesional que continúa adelante frente a lo imposible.
Moral de la Historia
Yo no se el tipo de problemas que estás teniendo. Puede ser un problema personal, conyugal, familiar, no se lo que está afectando tu estima o tu desempeño profesional pero una cosa si se. No todo está perdido. Todavía existe una cuerda y es tocando con ella que ejercerás tu talento. Tocando con ella es que vibrarás. Aprende a aceptar que la vida siempre te dejará una última cuerda. Cuando estés desanimado, nunca desistas. Aún existirá la cuerda de la persistencia inteligente, del “intentar una vez más", del dar un paso más con un enfoque nuevo. Despierta el Paganini que existe dentro de ti y avanza para vencer. Victoria es el arte de continuar, donde los otros resuelven parar. Cuando todo parece desmoronarse, bríndate una oportunidad y continúa hacia adelante. Toca la cuerda de la motivación y arráncale sonidos de resultados positivos. Pero antes pregúntate: ¿Quién motiva al motivador? Esto es: ¿Quién motiva tu cerebro, que motiva tu mano, que toca tu violín? No te frustres, no te desesperes, recuerda: aún existe la última cuerda. La cuerda del aprender de nuevo para deslumbrar y generar soluciones. Nunca la vida te romperá todas las cuerdas. Si los resultados están mal, es tu oportunidad de tocar la última cuerda, la de la imaginación que reinventa el futuro con innovación continua. Es siempre la cuerda olvidada que te dará el mayor resultado. Pero, si por acaso, estuvieras en el fondo del pozo, esta es tu oportunidad de tocar con la mejor cuerda del universo: Creer en tí
Marcos García Gamboa

EL SACO DE CARBÓN

Ripollés

Un día, Jaimito entró a su casa dando patadas en el suelo y gritando muy molesto.
Su padre, lo llamó. Jaimito, lo siguió, diciendo en forma irritada:
- Papá, ¡Te juro que tengo mucha rabia! Pedrito no debió hacer lo que hizo conmigo.
Por eso, le deseo todo el mal del mundo, ¡Tengo ganas de matarlo!
Su padre, un hombre simple, pero lleno de sabiduría, escuchaba con calma al hijo quien continuaba diciendo:
- Imagínate que el estúpido de Pedrito me humilló frente a mis amigos. ¡No acepto eso!
Me gustaría que él se enfermara para que no pudiera ir más a la escuela.
El padre siguió escuchando y se dirigió hacia una esquina del garaje de la casa, de donde
tomó un saco lleno de carbón el cual llevó hasta el final del jardín y le propuso:
- ¿Ves aquella camisa blanca que está en el tendedero? Hazte la idea de que es Pedrito y cada pedazo de carbón que hay en esta bolsa es un mal pensamiento que va dirigido a él. Tírale todo el carbón que hay en el saco, hasta el último pedazo. Después yo regreso para ver como quedó.
El niño lo tomó como un juego y comenzó a lanzar los carbones pero como el tendedero estaba lejos, pocos de ellos acertaron la camisa.
Cuando, el padre regresó y le preguntó:
- Hijo ¿Qué tal te sientes?
- Cansado pero alegre. Acerté algunos pedazos de carbón a la camisa.
El padre tomó al niño de la mano y le dijo:
- Ven conmigo quiero mostrarte algo.
Lo colocó frente a un espejo que le permite ver todo su cuerpo.... ¡Qué susto!
Estaba todo negro y sólo se le veían los dientes y los ojos. En ese momento el padre dijo:
- Hijo, como pudiste observar la camisa quedó un poco sucia pero no es comparable a lo sucio que quedaste tú. El mal que deseamos a otros se nos devuelve y multiplica en nosotros. Por más que queremos o podamos perturbar la vida de alguien con nuestros pensamientos, los residuos y la suciedad siempre queda en nosotros mismos.


Ten mucho cuidado con tus pensamientos porque ellos se transforman en palabras.
Ten mucho cuidado con tus palabras porque ellas se transforman en acciones.
Ten mucho cuidado con tus acciones porque ellas se transforman en hábitos.
Ten mucho cuidado con tus hábitos porque ellos moldean tu carácter.
Y ten mucho cuidado con tu carácter porque de él dependerá tu destino.

anónimo